DOGI se dispara un 1.320 % en 24 horas, pero la moneda de perro a la que todos llaman “el próximo DOGE” no es DOGI
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Un nuevo token perruno llamado dogi (DOGI) se ha disparado un 1.320 % en solo 24 horas, recordando al mercado que las memecoins siguen vivas. Mientras muchos traders persiguen este último pump, otro perro reclama su parte del foco: Maxi Doge (MAXI), una memecoin hipermusculada que se presenta como “el próximo DOGE” y que avanza desde la preventa.
La preventa de Maxi Doge roza ya los 4,3 millones de dólares, casi una quinta parte de la capitalización que DOGI tenía antes de su último impulso.
El tramo actual de preventa termina en pocas horas; después, el precio subirá por encima de los 0,000272 dólares por token, lo que empuja a los interesados a entrar temprano.
DOGI acaba de recordar a todos por qué las monedas de perro siguen gobernando el caos
El sector de memecoins ha vivido un ligero rebote, con un aumento cercano al 1,6 %, mientras el subsegmento de monedas de perro ha avanzado alrededor de un 2,7 %.
Dentro de ese grupo, DOGI ha sido el protagonista, ignorando la tensión por los mensajes de la Reserva Federal y yendo prácticamente en vertical.
DOGI se promociona como el primer token DRC-20 en la blockchain de Dogecoin (DOGE). A diferencia de DOGE, que cayó en torno a un 1,3 % en el mismo periodo, DOGI ha ofrecido el tipo de sacudida inesperada que define a las memecoins.
No es la primera vez que salta a los titulares. Durante el frenesí de memecoins del año pasado llegó a una capitalización de 41 millones de dólares, antes de desinflarse en el segundo y tercer trimestre de este año.
La volatilidad regresó en octubre y, tras su última erupción, DOGI se sitúa de nuevo por encima de los 25 millones de dólares de valoración, insinuando que podría recuperar parte del impulso perdido.
Estos episodios recuerdan por qué las memecoins siguen siendo tan atractivas para muchos traders: un movimiento aleatorio en un token olvidado puede multiplicar por cuatro una posición de la noche a la mañana.
Es la inyección de adrenalina que mantiene viva la cultura degen.
Un nuevo retador entra en la arena de las monedas meme: Maxi Doge
En paralelo, Maxi Doge se está consolidando como la apuesta de muchos inversores de riesgo que buscan el “próximo DOGE”.
Mientras Dogecoin se ha convertido en la cara amable de los ETFs de memecoins y se discute incluso como posible moneda para X, Maxi Doge quiere recuperar el espíritu original: apoyar a un underdog y llevarlo lo más alto posible.
Su mascota, un Shiba Inu de 240 libras estilo Baki Hanma, ilustra el mensaje: un dog coin diseñado para imponerse sobre los innumerables clones del mercado.
El proyecto dedica el 65 % de los fondos de preventa a marketing, con la estrategia declarada de maximizar la visibilidad y mantener el token en el centro de la conversación.
Aquí está tu oportunidad de ser titular de Maxi Doge
Quien quiera apostar por esta narrativa puede acudir a la web de la preventa de Maxi Doge y conectar su monedero favorito, incluido Best Wallet, disponible en Google Play y App Store.
La compra se puede realizar con ETH, BNB, USDT, USDC o tarjeta bancaria, tal y como se analiza en como comprar Maxi Doge.
Los compradores de preventa pueden hacer staking de MAXI a través del protocolo nativo, con un rendimiento anual dinámico del 72 % APY.
El contrato inteligente de Maxi Doge ha sido auditado por Coinsult y SOLIDProof, lo que pretende aportar garantías adicionales sobre la seguridad del código.
Con una preventa ya cercana a la capitalización de DOGI y un enfoque extremo en el marketing, Maxi Doge aspira a ser el próximo gran perro del ecosistema meme, mientras el mercado sigue buscando cuál será el siguiente token capaz de repetir un rally del 1.320 %.
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